Título original:
Sueñan los androides
Año:
2014
Atlántida Film Fest:
Sección Oficial
Duración:
61 min
País:
España
Director:
Ion de Sosa
Reparto:
Manolo Marín, Moisés Richart, Marta Bassols, Coque Sánchez
Calificada
como una película de NO género por mezclar precisamente todos los
géneros, Sueñan los androides
se nos presenta como un largometraje que resalta
por ser un claro ejemplo de cine low-cost. Su inicio con panorámicas
propias de Benidorm, que podrían ser las instantáneas de cualquier
turista en época estival, seguidas de disparos provenientes de un
extraño hombre y una retahíla de vídeos
caseros que bien podrían ser las cintas de
una familia cualquiera, hacen de este largometraje una
cinta un tanto desconcertante.
La acción se sitúa en el año 2052, en España, cuando las ciudades están prácticamente desiertas, habitadas únicamente por edificios y obras inacabadas, ancianos en busca de tranquilidad para pasar sus últimos días y unos pocos jóvenes que todavía luchan por encontrar algo de trabajo y dignidad. Sin embargo, la situación en ese futuro no tan lejano ha cambiado en diversos aspectos, la oveja, un animal normal y corriente en la actualidad, dentro de casi cuarenta años costará cuatro millones y medio de pesetas, sí, pesetas, es un mundo en el que todo ha retrocedido fruto de unas decisiones mal tomadas.
Bajo el uso de
imágenes cotidianas, diálogos absurdos y escasos y unos personajes
que carecen de cualquier psicología o evolución a lo largo del
metraje, Ion de Sosa construye una historia bajo dos claros
referentes, por un lado, la novela ¿Sueñan
los androides con ovejas eléctricas?
de Philip K. Dick, por otro lado, la película Blade
Runner del director Ridley Scott que
toma como base la novela anterior. De este largometraje destaca
también la música, esas canciones típicas
de una España de antaño que compaginan perfectamente con las
imágenes de una ciudad futura pero devastada por el pasado.
¿Un reflejo de la
crisis que se vive en España? ¿Una metáfora de que las nuevas
tecnologías están terminando con la humanidad? ¿Un reflejo de lo
que será nuestro país dentro de unos años? Puede que no haya
terminado de entender la película, que resulte imposible empatizar
con ninguno de los personajes porque pasan casi desapercibidos en la
historia y carecen de psicología alguna, que prefiera viajar para
observar en primera persona imágenes de ciudades, pero personalmente
Sueñan los androides no
me ha terminado de convencer.
3/10
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