Título original:The Age of Adaline
Año:
2015
Fecha de estreno:
31 de Julio de 2015
Duración:
112 min
País:
Estados Unidos
Director:
Lee Toland Krieger
Reparto:
Blake Lively, Michiel Huisman, Harrison Ford, Ellen Burstyn, Kathy Baker, Amanda Crew, Richard Harmon, Anjali Jay, Lynda Boyd, Peter J. Gray, Lane Edwards
Distribuidora:
Entertainment One Films Spain
Cojan una batidora. Ahora, introduzcan a la pija protagonista de Gossip Girl, al mercenario amante de Daenerys Targaryen, un montón de libros y un buen puñado de pedantería superflua. Ahora lo aliñan abundantemente con The Man From Earth y El curioso caso de Benjamin Button. Y el toque definitivo: un narrador insufrible que describa cada detalle de lo que ya se está mostrando en pantalla. Et voilà! Tendrán ustedes un melodrama soso y aburrido, idóneo para pasar las tardes del sábado frente a la pantalla del televisor. No se apuren si florecen sus instintos asesinos cuando les estén relatando cómo le colocan a la muchacha un desfibrilador mientras están viendo cómo se lo ponen. O si se sienten insultados cuando la voz en off les explica con lujo de detalles una imagen que habla por sí sola. Sí, la narrativa de El secreto de Adaline podría resumirse como el anti-cine.
El argumento no promete especialmente: una joven de 29 años se vuelve inmortal por ciencia infusa, renunciando al cabo de los años a una vida normal. Huyendo y cambiando de ciudad cada diez años (¿les suena?), incapaz de amar a nadie (¿y ahora?) y condenada a la soledad y a ver morir a sus seres queridos, un buen día conoce a un hombre atractivo, acaudalado y culto (un partidazo, vamos) que se queda prendado de ella nada más verla. Porque la chica también es una verdadera joya: preciosa, ilustrada y con un aura de bondad abrumadora. ¿Qué podría salir mal?
En realidad, muchas cosas: empezando por el hecho de que mientras él fuera acumulando arrugas ella seguiría siendo una bella joven, y siguiendo por el pequeño detalle de que tiene una hija de unos 80 años. Pero eso no es todo. En una película de esta naturaleza no podría faltar la gran casualidad de turno que constituye el gran giro de guión: resulta que el padre del pretendiente es un exnovio de Adaline. Y no sé qué me ha dolido más, presenciar un conflicto tan ridículo o ver a Harrison Ford metido en estos berenjenales.
Como podrán imaginarse, resulta un tanto incómodo que la mujer que te dejó tirado cuarenta años atrás ahora sea la resplandeciente novia de tu retoño. Pero eso no impide que al final todo se resuelva con un deux ex machina de lo más predecible, proporcionando al espectador, al menos, la discutible satisfacción de haber adivinado al detalle los últimos treinta minutos de película.
En el aspecto técnico, la cinta es correcta, con una fotografía a ratos muy interesante y a ratos extremadamente insípida; con una ambientación y un colorido muy similar al de El curioso caso de Benjamin Button, el cual resulta agradable en un principio y absolutamente cansino a la mitad del film.
En definitiva, esta manida trama repleta de personajes planos (con un reparto igualmente mediocre) seguramente les haga salir entretenidos de la sala, pero no sin un exhalar un fuerte suspiro: "¡vaya idiotez!"
3/10
Hola, leí tu crítica, aunque no compartamos lo mismo, A mi me gustan las películas con tonos románticos, definitivamente en tu lista debe estar El secreto de Adaline, que nos presenta una historia llena un poco de fantasía, sin embargo el guion hace que te olvides de esa parte y lo hagas verosímil. Adaline (Blake Lively) después de sufrir un accidente en su automóvil y sobrevivir, se ve obligada a alejarse de donde vive y de las personas, pues esconde un secreto a través de los años hasta que se ve frente a frente al amor. En cuanto a la producción, está bien ambientada y los colores cálidos visuales van acorde a la calidez del amor que Adaline está buscando.
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