La semana pasada el episodio de Modern Family dio mucho de qué hablar. En
una nueva entrega de la serie, seguimos haciéndonos eco de las vivencias de una
de las familias más famosas de América. Hospitalización, un dron espía y un anuncio por grabar, de todo un poco. ¡Alerta spoiler!
Mitch y Cam están algo nerviosos. Su
hija Lily va a actuar en el colegio, un concurso de talentos, y parece que no
tiene ninguno. Con Cam al piano,
descubrimos que la joven no puede sostener ni una nota. Pero lo cierto es que
Cam no está tan preocupado por el ridículo que pueda hacer Lily como por el que hace él por
consiguiente delante de su némesis, Andrew.
Su enemigo de siempre le ha hecho
mucho daño pero Mitch lo ve todo como
una tontería propia de niños pequeños, hasta que averigua que Andrew se ha
casado con Simon, su máxima competencia en
la facultad de derecho. A la hora del concurso, deciden dejar que su hija
lo haga lo mejor posible.
Actúa detrás de una niña que se ha
rapado el pelo en solidaridad con su madre, enferma de cáncer, y canta I
Will Always Love You de manera perfecta. Entre el público aparece Lily,
que no piensa actuar detrás de ella pues sabe que no puede ganar. Deciden marcharse,
eso sí, después de comprobar que Andrew y Simon también salían de allí con su hija. Me encanta que Cam tenga tantos
enemigos por ahí y lo falsos que son todos cuando se encuentran.
Jay y Claire tienen que grabar un
nuevo anuncio para su empresa de armarios y responder a la campaña publicitaria de su principal –y desde
siempre- competidor Closets, closets, closets, closets. Pese a los intentos de
Claire, su padre sigue insistiendo en la fórmula que le funcionó en los años 80.
La mujer ni siquiera comprende el slogan
que se le ocurrió a Jay hace tanto tiempo. Cuando están grabando el anuncio, todo el mundo se da cuenta de lo mal que
está quedando menos el propio Jay. El departamento de marketing le asegura
a Claire que es necesario que alguien le diga algo, porque parece malhumorado y
no es lo mejor para vender armarios.
Su hija se arma de valor y le dice la
verdad, pero Jay se cabrea y entonces se
pasa todo el día fingiendo –bastante mal- cara de felicidad. Finalmente hablan
sobre el asunto y descubrimos que Jay lo que no quiere es parecerse a su padre,
siempre enfadado. Además, escuchará todas
las ideas de la familia para un nuevo anuncio.
En casa de Jay, Gloria está harta de
escuchar llorar a Joe, debido a que ha
decidido retirarle el chupete. Por si fuera poco, mientras está en la
piscina junto a Manny, Phil y Luke, hace aparición un dron que no para de
espiarla en bañador. Phil, en un intento por cazarlo para que la mujer no tenga que taparse, pierde el bañador (que le
había dejado Jay) y termina cayéndose al agua.
El momento, grabado por el dron,
termina en internet con un montón de visitas. Un nuevo intento, con Luke en
bikini haciéndose pasar por Gloria, también
termina en internet después de que saliese junto a Phil y Manny tras él en
bicicleta y terminasen estampados contra un camión.
Menos mal que se les une Jay y empiezan a lanzarle cosas, pelotas y demás, y consiguen derribarlo. Aunque en realidad es obra de Gloria, que harta del aparato no duda en dispararle con una pistola desde el balcón. Sofía Vergara me ha recordado con la pistola a su participación en Machete.
Menos mal que se les une Jay y empiezan a lanzarle cosas, pelotas y demás, y consiguen derribarlo. Aunque en realidad es obra de Gloria, que harta del aparato no duda en dispararle con una pistola desde el balcón. Sofía Vergara me ha recordado con la pistola a su participación en Machete.
Haley y su novio han salido de cita
doble con Andy y Beth, pero ésta no ha aparecido. Andy la excusa: la joven tiene mucho trabajo, y está
lejos. Haley, sin embargo, está enfadada con la chica. Durante la cita fallida,
Andy empieza a quejarse de dolor en el abdomen y más tarde descubrimos que se trata de un ataque de apendicitis
que lo lleva directo al hospital.
Creyendo que está dormido por la
medicación, Haley le confiesa lo que siente por él, y que si quiere, ella está
disponible a intentarlo. En ese momento
aparece por la puerta Beth, que Haley había llegado a pensar que ni
existía. De disculpa por no haber aparecido antes y se queda con Andy, ante la cara de drama de una Haley que
sale disgustada por la puerta. En ese momento vemos como Andy abre los ojos, lo
ha escuchado todo. Yo soy muy pro Handy
así que ya pueden estar arreglando esto.
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