Título original:
Autómata
Año:
2014
Fecha de estreno:
23 de enero de 2015
Duración:
110 minutos
País:
España
Director:
Gabe Ibañez
Reparto:
Antonio Banderas, Birgitte Hjort Sørensen, Melanie Griffith, Dylan McDermott, Robert Forster, Tim McInnerny.
Distribuidora:
A Contracorriente Films
Es evidente que el género sci-fi es
una de las tareas pendientes para el cine español y, sin considerarme como aquellos
que opinan que el cine español es inferior al resto (de hecho, creo que el cine
español es un baluarte a nivel internacional), Autómata es un fiel ejemplo de ello. Director con todavía mucho
recorrido por delante, Gabe Ibañez presenta una película con bastantes carencias,
sobre todo en el guión (también creado por él mismo), y que más adelante
desmenuzaremos. En cierto modo resulta contradictorio debido a que en su
anterior film, Hierro (2009), Ibañez conseguía
intrigar a todo Sitges con un inquietante thriller, que más adelante daría sus
frutos con el premio para Elena Anaya como mejor actriz.
La temática sobre la que se desenvuelve
la película no es más que otra historia futurista donde las máquinas en
principio controladas por los humanos, acaban por despertarse de dicho dominio
alterando los protocolos de la ley robótica. En referencia a la misma es
necesario señalar otras como Blade Runner
(Scott, 1982), El hombre bicentenario
(Columbus, 1999) o Yo, robot (Proyas,
2004) a las cuales Ibañez muestra ciertas referencias que no terminan de
funcionar adecuadamente. Además de la dificultad que supone competir con el
experto género sci-fi estadounidense, no terminan tampoco de encajar
determinados conceptos que se establecen como las consecuencias producidas por
la radiación en el criterio temporal definido (año 2044) o la desaparición de los
océanos.
En cuanto a los actores es relevante
resaltar la actuación luchadora de Antonio Banderas, quien lleva prácticamente
todo el peso de la película, pero que no consigue arreglar los defectos de un
débil guión que va de más a menos. Sin una lógica correctamente definida, la
trama toma un giro en el que termina por ahogar en el papel a Banderas, donde
la única vía es un callejón sin salida predecible desde el principio. El resto
de actores (Melanie Griffith, Dylan McDermott o Robert Forster) tampoco aportan reflejos de veracidad a la historia, sin obtener una
respuesta de empatía del espectador sobre el robot Cleo y mucho menos despertar
el interés sobre el argumento.
Finalmente, Autómata es una película que no termina de despuntar porque no
muestra aspectos diferentes de otras sci-fi referentes a la robótica. Sin
embargo, la conformación de los robots es buena aunque su rol en la historia no
encaja de una manera apropiada, pareciéndose totalmente similar a la de los
simios liderados por el doctor Zaius en El
planeta de los simios (Schaffner, 1968). De esta forma no quiero decir que
las ideas mostradas por Gabe Ibañez sean malas, sino que no terminan de
desempeñar un significado global, un estudioso e interesante fondo junto con la
historia. Así pues, la ciencia ficción sigue siendo una tarea pendiente para el
cine español.
5/10
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