The Babadook
Año:
2014
Fecha de estreno:
16 de Enero de 2014
Duración:
93 min
País:
Australia
Director:
Jennifer Kent
Reparto:
Essie Davis, Noah Wiseman, Daniel Henshall, Hayley McElhinney, Barbara West, Ben Winspear, Tiffany Lyndall-Knight, Tim Purcell
Distribuidora:
eOne
El cine de terror pocas
veces goza de buenas críticas por parte de los medios. Por ello
precisamente, cuando una película del género destaca entre la
crítica especializada se crea mayor revuelo alrededor suyo, y éste
bien es el caso de Babadook, la cinta de terror australiana de
bajo presupuesto que ha causado sensación tanto festivales como
Sitges, premios como los Critic's Choice (aquí nominaciones más que
premios) o el Círculo
de Críticos de Nueva York o de páginas como RottenTomatoes
(97%) o Metacritic
(87%).
Pero en cambio, en el
público, la sensación general, aunque favorable, no es tan
entusiasta, luego veremos el por qué.
Jennifer Kent, inspirada
por su propio cortometraje Monster (al
que llama 'Baby Babadook' cariñosamente) y con un presupuesto muy
modesto (dos millones de dólares aproximadamente) nos relata la vida
de una madre, Amelia, y su hijo, Samuel, y su relación frente a la
ausencia del padre de familia, fallecido en un accidente de tráfico
el mismo día del nacimiento de Samuel. A modo de curiosidad, decir
que Babadook es un
anacronismo del inglés “a bad book” (un libro malo, para los no
curtidos) y a su vez se inspira en la palabra serbia para el
“boogeyman” (hombre del saco), que es babaroga. Y
no en vano el Babadook es presentado en la película mediante un
libro muy singular.
Realmente, para hacer una crítica o visión de la película, habría que meterse de lleno en la materia y destriparla, por tanto, antes de eso recomiendo que veas la película y vuelvas a esta crítica ya con la película fresca en la memoria.
Pero
antes, la reflexión breve de ¿por qué los espectadores no
congenian con Babadook?
Lo relataré desde mi propia experiencia. Yo he visto la película
dos veces, en la primera, un preestreno con gente deseosa de ver una
película de sustos y que, ante la exageración del niño
protagonista y otros elementos alejados del cine más comercial, se
le buscó el lado risible al asunto, se empezó con las coñas y, en
ese ambiente, la película se sintió muy bizarra y caótica.
Situaciones exageradas, vislumbramiento del poco presupuesto del
proyecto, ironía de escenas con doble sentido, risas, etc
Así,
al salir de la sala, tienes una sensación rara en la cabeza. Un
principio prometedor, con buen uso del sonido y la ambientación,
pero que acaba en una resolución grotesca y risible.
Por
fortuna, pude verla por segunda vez, con una persona que sí estaba
metida en la trama y participando del terror que presenta. Y, gracias
a ya conocer los acontecimientos, pude intentar atar cabos y buscar
el sentido de lo que quería mostrarnos la directora con todo
aquello. Y, así, la película cobra mucho color, la verdad.
Yo
creo que la gente en general se queda en las capas superficiales de
las cosas. Buscan el susto rápido, la impresión y sobresalto antes
que la profundidad, la metáfora o las intenciones artísticas del
autor. Quizás por el género en sí, quizás porque el espectador
medio pasa “de comerse la cabeza”, la cuestión es que es más
fácil decir que algo es malo a decir “no lo entiendo, voy a
explorar en ella”.
Bueno,
pues para los que prefieran la segunda vertiente, para ellos entraré
en las conclusiones que saqué tras el segundo visionado.
Por
todo lo que tiene que ofrecer, Babadook me parece una muy acertada
opera prima que, no sólo sabe jugar bien con los elementos del
terror clásico (hay muchas referencias a cortos de los inicios del
cine, también a películas como El
fantasma de la Ópera
de 1925, El
extraño amor de Martha Ivers,
Las tres caras
del miedo,
de Bava, El resplador, etc) de manera inteligente y sabia, sonidos
fuera de campo, un clima malsano, ese gran libro, la gran actuación de su protagonista (no podíamos dejar pasar la mención para Essie Davis, que está estupenda) la forma de
presentar a sus dos personajes (madre e hijo) o al propio Babadook,
la forma de sacar partido de un escaso presupuesto y que se note lo
menos posible (sentimos la presencia del Babadook a menudo, pero
realmente verle muy poquito), pero también por cómo es capaz de dar
una segunda lectura, otra capa a la película, lo que la hace rica en
matices. Por ello no me queda otra que estar de la parte de aplaudir
su estreno, aire fresco al género, pero también porque abre la
puerta a una directora que parece tener cosas interesantes que
ofrecer: Jennifer Kent.
7/10
Nosotros no la hemos visto y la verdad es que, aunque parece interesante, siembra tanta discordia que casi da miedo ... pagar los 9€ de la entrada, jajaja.
ResponderEliminarMuy buena reseña.
Hemos Visto