jueves, 27 de abril de 2017

Plan de fuga. Lost in redemption.

Título original:
Plan de fuga
Año:
2017
Fecha de estreno:
28 de abril de 2017
Duración:
105 min
País:
España
Director:
Iñaki Dorronsoro
Reparto:
Alain Hernández, Javier Gutiérrez, Luis Tosar, Alba Galocha, Florín Opritescu, Jaroslaw Bielski, Israel Elejalde
Distribuidora:
Warner


La proliferación en los últimos años de thrillers en el cine español ha sido un síntoma de prosperidad – por su carácter funcional en la taquilla- y de cambio. Un cambio demandado por una parte de la audiencia, cansada ya del cine nacional de comedia de brocha gorda que, por desgracia, aún sigue dando buenos frutos. No obstante, tanto intento por hacer cine diferente, encasillándose en el thriller -aún con sus derivaciones a lo psicológico, lo policial, lo criminal, etcétera- ha acabado generando el efecto contrario. Uno siente que el cine español vuelve a estancarse en lo arquetípico, en lo fácil, repitiendo historias mil veces vistas, con actores acomodados en el mismo tipo de papel una y otra vez, y contadas con poca personalidad - salvo excepciones.

Plan de fuga de Iñaki Dorronsoro, se adscribe a la comodidad que estábamos mencionando. Envuelta en un aura de suspense, acción e investigación policial, el nuevo trabajo del vitoriano, sigue las andadas de un experto en hacer butrones que es contactado por una banda organizada de ladrones para dar un golpe en el Banco de Crédito Suizo de Madrid. Antes de llegar a la mitad del metraje, la trama da un giro inesperado -del que no hablaremos, para que os pueda pillar por sorpresa- y cambia la concepción que hasta ahora teníamos del protagonista. Un protagonista (Alain Hernández) atormentado por su pasado y en continuo conflicto por ayudar a su amigo drogadicto (Javier Gutiérrez).


La sintomatología de Plan de fuga es cuasi idéntica a otros thrillers de atracos con personaje principal con una carga dramática detrás. Incluso en su intento de originalidad con giros en la trama para engañar al espectador sobre lo que está viendo y así mantenerlo atrapado en la historia, ofrece pocos ápices de diferenciación. Y es que, los principales tópicos con patas, son los propios personajes. Un protagonista de buen corazón con pasado traumático con su familia rota a raíz de su trabajo; un yonqui también buenazo deseando salir de la drogadicción; una joven prostituta dulce; un superior de aires cabroncetes pero coleguita... Vamos, son todos unos buenazos excepto los antagonistas.

En cuanto a la trama en sí, hay tramos donde la acción está manejada de manera interesante (las persecuciones y redadas policiales), aunque no así la tensión (los atracos con butrones en espacios cerrados). Se pierde fuerza en este aspecto por el continuo recuerdo del drama humano al cual se le da mayor importancia que al cine de atracos per se (ay, esa escena final a lo Lost in Translation). En cierto modo, la película de Dorronsoro nos remite a ese híbrido de géneros disfuncional de Redención, protagonizada por Jason Statham, donde el personaje del británico poseía un fondo, un pasado angustioso y no suponía un mero arquetipo de acción. 


Alain Hernández trata de levantar el papel de supuesto tipo duro sufridor pero no tiene carisma ni garra suficiente en este rol en las antípocas de El rey tuerto, donde él era, de lejos, lo mejor. No nos podemos olvidar de mentar a Luis Tosar. Como no podía ser de otra forma, el gallego aparece en este thriller, con un papel más o menos relevante. Esto es, como en el 90% de películas de este género realizadas en España en los últimos diez años.

En resumen, Plan de fuga resulta un entretenimiento tan fugaz como anodino. La historia apenas aporta ningún carácter nuevo y la realización se mantiene en derroteros convencionales, sin riesgos, y con una semejanza palpable a tantas otras producciones del mismo calado.

4/10


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