Gimme Danger
Año:
2016
Fecha de estreno:
25 de Noviembre de 2016
Duración:
108 min
País:
Estados Unidos
Director:
Jim Jarmusch
Reparto:
Documental
Distribuidora:
Avalon
Nadie mejor que un verdadero fan
de un grupo de música para relatar sus hazañas y desventuras. Y si además tiene
el irreprochable talento de Jim Jarmusch tras las cámaras, mucho mejor. Después
de haberse centrado en su amigo Neil Young en un documental previo, ahora es el
turno de los Stooges. Este grupo punk atesoraba una interesante historia que
llevar a la gran pantalla, y Jarmusch ha sido capaz de separar el grano de la
paja para componer un ilustrativo y entretenido film, cargado de la atractiva
energía de una fuerza de la naturaleza como es Iggy Pop.
Como sucede en este tipo de
obras, la cercanía del público hacia ellas puede agotarse en la falta de
conocimiento o interés en el grupo. Jarmusch, consciente de eso, presenta las
claves de la banda, desde sus comienzos hasta su disolución con llamativos
toques de comedia y de ingenio. Pero, sobre todo, ese desarrollo es llevado a
cabo de una forma ágil, sin recrearse demasiado en cada uno de los eventos
determinantes, lo cual no impide que se elabore un certero retrato de lo que
era formar parte de una banda de rock en los años sesenta y setenta. Las
drogas, el alcohol, la autodestrucción… No hay mucha diferencia con algunos
grupos que nos encontramos hoy en día, pero Iggy Pop y sus colegas fueron
algunos de los pioneros en ese estilo de vida basado en vivir de la misma forma
en que se expresaban musicalmente. Una actitud vital que Jarmusch se esfuerza
por manifestar en la cinta, contando con el fascinante apoyo del propio Iggy,
que se pone ante la cámara para responder con su espontánea gracia natural a
todo tipo de cuestiones. Tras haberle visto trabajando junto al director en
Dead Man, es toda una experiencia recrear su vida musical y personal en este
documental.
Obviamente el protagonismo recae
sobre el líder de la banda, transformándose la película en una narración
biográfica de esta genuina estrella del rock. Las imágenes de Iggy en su
infancia y su relación con las personas que le rodeaban nos ayudan a entender
sus motivaciones, y uno de los elementos más positivos de Jarmusch es su
habilidad para recrear artísticamente aquellos momentos que no fueron captados
audiovisualmente. En definitiva, Gimme
Danger asimila la esencia de un grupo cuyas esbeltas alas se derritieron
con velocidad, dando lugar a un documental necesario para comprender a uno de
los grupos más desconocidos e influyentes a partes iguales. Jarmusch rinde su
tributo personal y el público no puede hacer más que sentarse a disfrutarlo y a
aprender de él.
7/10
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