Colossal. Introspección a lo grande.

Título original:
Colossal
Año:
2016
Fecha de estreno:
30 de Junio de 2017 
Duración:
109 min
País:
Estados Unidos, Canadá, España, Corea del Sur
Director:
Nacho Vigalondo
Reparto:
Anne Hathaway, Jason Sudeikis, Dan Stevens, Tim Blake Nelson, Austin Stowell
Distribuidora:
Versus Entertainment

Las películas de Nacho Vigalondo nacen siempre de un concepto muy definido. En el caso de su cuarta película, Colossal, por fin ha tenido la oportunidad de desarrollar una idea con un presupuesto razonable. El realizador cántabro ha jugado con la ciencia ficción con esta dramedia protagonizada por Anne Hathaway, que encarna a una joven desorientada en su vida, con demasiado gusto por la bebida para paliar su insatisfacción profesional y personal. Hasta ahí no se intuye la innovación por ningún sitio, pero la gran novedad llega cuando la peculiar heroína de la cinta descubre que tiene un vínculo especial con un monstruo que aparece ocasionalmente en Corea del Sur. Una locura conceptual que llega a nuestro país casi un año después de su paso por el Festival de San Sebastián, cuando las esperanzas de que fuera a proyectarse en los cines españoles ya se habían mermado.

Tirando de lugares comunes, cuando la protagonista, Gloria, se ve obligada a dejar Nueva York y regresar a su casa, se reencuentra con un antiguo compañero del colegio, Oscar, interpretado por Jason Sudeikis. Una vez que se encuentra en su amplio y vacío hogar, reflejo de su propia vida, se entera de que un enigmático monstruo apareció por la noche en Seúl. Ese evento provoca que Gloria comience a recordar cosas del pasado, y una fuerza empieza a crecer en su interior. Vigalondo explora el viaje de Gloria hacia la autoestima, hacia la comprensión de ella misma. Tiene que encontrar el origen de sus complejos para saber por qué parece estar destinada al fracaso perpetuo. En ese camino se encuentra con los outsiders liderados por Oscar, que pasan cada noche en el bar regentado por el amigo de Gloria.

El monstruo de Colossal es una excusa para ejecutar esa labor de introspección, que no sólo afecta a la protagonista, ya que es esencial la involución de Oscar, que demuestra que la inseguridad soterrada puede hacer más daño que los puños de acero de un robot gigante. La película es una carta de amor a la corriente de la serie B encabezada por Ishiro Honda, la de las peleas entre seres gigantescos, que asolaban ciudades creadas a partir de maquetas. Sin embargo, el monstruo ingeniado por Vigalondo no tiene un aspecto sospechoso, sino que también logra extender su vínculo al público. Colossal tiene varios defectos -como su arranque lento y la pobre aportación de varios personajes secundarios-, pero es el tipo de cine que demuestra el estado pletórico de originalidad de los cineastas españoles.

7/10