Título original:
Gui lai (Coming home)
Año:
2014
Fecha de estreno:
05 de Agosto de 2016
Duración:
111 min
País:
China
Director:
Zhang Yimou
Reparto:
Gong Li, Chen Daoming, Huiwen Zhang, Tao Guo, Ni Yan, Chun Li
Distribuidora:
Golem
Un estreno de Zhang Yimou
siempre es una gozada, porque pocas veces defrauda. Y mientras asoma
la patita La gran muralla su
última superproducción con Matt Damon a la cabeza (esa
tardarán menos en estrenarla), ahora se estrena en España Regreso
a casa, película que data de 2014. El director de La casa de
las dagas voladoras suele alternar estrenos más notorios (de
mayor presupuesto) con otros de carácter más íntimo. En esta
ocasión hablamos de uno del segundo grupo, adaptando The criminal
Lu Yanshi, una novela de Yan Geling (de quien ya adaptó otra
novela suya en Las flores de la guerra).
Regreso a casa
tiene el toque de las primeras obras de Yimou, imperfectas pero
rebosantes de sensibilidad y cierto aroma (secundario) reivindicativo
contra la Revolución Cultural China. Enmarcada en los años setenta,
la película nos habla de la ruptura familiar que supone la reclusión
de Lu Yanshi, el padre de la familia, a un campo de trabajo por sus
ideas políticas. Éste se escapa e intenta reunirse con su familia
pero su hija Lu Danyu lo delata por miedo a que se resienta su
carrera como bailarina. Años más tarde, ya finalizada la Revolución
Cultural, Lu Yanshi es liberado y vuelve a su hogar, pero su
reencuentro no será el esperado.
La musa del director,
Gong Li, vuelve a protagonizar una película suya (octava
colaboración ya), recreando el papel de la mujer de Lu Yanshi,
coprotagonista de este drama romántico del que preferiría no
adelantar uno de los hechos clave, aunque se mencione en varias
sinopsis, pues siempre soy más de ir con cuanta menos información
mejor al encuentro. Simplemente decir que el pasado es el leitmotiv
de la trama, donde los tres personajes (padre, madre e hija) son
prácticamente todos los personajes de la película. Yimou consigue
crear ese clima oriental cercano e íntimo, sensible rozando pero sin
traspasar a la sensiblería, y con el tema que trata podría haberlo
hecho. Pero tanto el tema del camarada Fang, las cartas, el piano,
las fotos recortadas o la danza, son tratados con tacto y delicadeza,
como buen film oriental. Hacia el final, incluso redondea la parábola
con el presente envejecido en busca del joven pasado (el recuerdo),
paralelismo también para una sociedad que no debe olvidar los hechos
que nos han llevado hasta donde estamos (en su caso referido a la
Revolución Cultural China).
Regreso a casa
supone la vuelta a España del cine de Zhang Yimou, del cual hacía
ya tres años que no disfrutábamos en la gran pantalla, una película
para deleitarse en la paciencia y la perseverancia como patrón en la
vida. Un bello y triste drama sin lágrima fácil pero emotivo y
cercano.
7/10
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