Título original:
Mediterranea
Año:
2015
Atlçantida Film Fest 2016:
Sección Fronteras
Duración:
107 min
País:
Italia
Director:
Jonas Carpignano
Reparto:
Koudous Seihon, Alassane Sy, Paolo Sciarretta, Pio Amato, Mary Elizabeth Innocence, Annalisa Pagano, Vincenzina Siciliano, Sinka Bourehima
No podía faltar en la
sección Fronteras del Atlántida Film Fest 2016 una película como
Mediterranea, elegida por Italia para representarles en los
Oscars pasados y que nos habla de la inmigración, pero en vez de
centrarse en el tortuoso viaje hacia su nuevo destino (algo que se
ventila en los primeros compases), la película pasa rápidamente
esta cuestión por una que le interesa más: ver cómo se sobrevive
una vez llegados a la “tierra prometida”.
Así seguimos a Ayiva y
su amigo Abas desde Burkina Faso, pasando por Libia hasta llegar a
tierras italianas, donde deberán buscarse la vida para mandar dinero
a sus allegados que no han viajado con ellos. Y mientras el trabajo y
los deseados papeles llegan, también hay tiempo para lidiar con las
desigualdades, los trapicheos del mercado negro o el racismo. El
problema de este tipo de películas es que o te implican, o las ves
desde la barrera, sin conexión emocional. Y lamentablemente,
Mediterranea no sabe conectar con el espectador, y hacer una
película sobre la inmigración falta de emoción es, a mi modo de
ver, un pecado bastante considerable.
Tiene detalles
interesantes, como el de que ambas niñas que salen, la hija de uno
de los inmigrantes y la del patrón para el que trabaja, tengan el
mismo gusto musical, mostrando así sutilmente las semejanzas dentro
de diferentes clases sociales, una pena que estos detalles sean más
bien escasos, y todo tire por un tono rudimentario donde se intenta
abarcar varios flancos pero desarrollando poco cada uno. A estas
alturas, no me basta con que se haga una película “necesaria”
para reflejar una temática espinosa de la sociedad, sino que
necesito además otros factores cinematográficos que me estimulen
para que su visionado me merezca la pena, y Mediterranea es un
tanto limitada en ese aspecto. Con el tema reciente de los refugiados
y tantas historias leídas, la realidad pasa por encima de la ficción
una vez más y si bien la película no destaca negativamente, tampoco
lo hace a la inversa, quedando cual patera a la deriva en el mar del
olvido. Y esto, para una película que tiene como meta remover
conciencias, es un punto bastante negativo.
5/10
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