El hombre más buscado. A la deriva en Hamburgo.

Título original:
A Most Wanted Man
Año:
2014
Fecha de estreno:
12 de septiembre de 2014
Duración:
121 min
País:
Reino Unido, Estados Unidos y Alemania
Director:
Anton Corbijn
Reparto:
Philip Seymour Hoffman, Grigoriy Dobrygin, Rachel McAdams, Willem Dafoe, Robin Wright, Daniel Brühl 
Distribuidora:
eOne

Cuando estás viendo una película no hay sensación más frustrante que tener que esforzarte para que te interese lo que estás viendo, lo ideal sería lo contrario, que el interés te conduzca a involucrarte en ella. Viendo El hombre más buscado me encontré con el primer caso. En el nuevo film de Anton Corbijn nos encontramos en Hamburgo, en el contexto de la falta de entendimiento entre agencias de seguridad de diferentes países tras el duro golpe que supuso el 11-S, y la inquietud que se generó posteriormente por el pensamiento paranoico y persecutor transmitido desde Estados Unidos.

El principal reclamo para ver la película es que se trata del último trabajo completo de Philip Seymour Hoffman, que falleció hace siete meses, dejando un vacío para todos aquellos que disfrutábamos de su trabajo. Obviamente Hoffman no necesitaba un gran papel con el que despedirse, ya que ha dejado un legado repleto de inolvidables roles como el de Truman Capote o el de Lancaster Dodd (en Capote y The Master, respectivamente), pero en El hombre más buscado vuelve a demostrar su gran habilidad para dar vida a un personaje complejo y destaca sobre el resto del reparto. Willem Dafoe, Rachel McAdams, Robin Wright, Daniel Brühl y Grigoriy Dobrygin completan el reparto, dejando pinceladas de su calidad, pero no llegan a destacar.

Lo que realmente hace diferente a la película es su realizador, Anton Corbijn, que sigue un modelo similar al de su anterior película, El americano. Corbijn es un reputado director de videoclips, que durante las últimas décadas ha trabajado con grandes bandas como Depeche Mode, U2, Nirvana y The Killers, siendo esas una pequeña muestra de sus colaboraciones, dejando clara su personalidad en esas breves piezas. Esa personalidad queda reflejada también en sus películas, nos encontramos ante un suspense que evita las exageraciones habituales, más realista. Pero tanto en El americano como en El hombre más buscado se da el mismo problema, el cuidado de las imágenes es muy meticuloso, lo que queda patente en planos espectaculares y en una fotografía muy bella, pero se deja de lado el guión. La adaptación de la novela de John le Carré queda en un plano secundario, en mi opinión esto es un gran fallo porque viendo otras adaptaciones de novelas de le Carré como El topo, la historia es fundamental y hay varios personajes que llaman la atención, no como en el caso de El hombre más buscado que tiene como rol más llamativo el de Philip Seymour Hoffman, que ni siquiera es el protagonista, ya que al personaje principal, sobre el que debería girar el film, apenas se le presta atención. 

El cuidado de la apariencia de la película no basta para mantener un ritmo que implique al espectador, y el montaje tampoco colabora en este aspecto, porque no se consigue administrar la intriga. Lo que hace grande a directores como David Fincher es que todos los elementos de sus películas trabajan juntos, consiguiendo un ritmo que ya sea pausado o frenético mantendrá a la gente atenta e interesada. En El hombre más buscado hay momentos esporádicos de suspense, pero no son los suficientes como para encubrir la falta de coherencia entre la mimada estética y la caótica narrativa.

4/10