Carmina o revienta. La vulgaridad convertida en genialidad independiente.

Estamos ante algo nuevo, algo que cambiará, espero que para bien, la forma de ver cine en este país. Y no es que con la película de Paco León las descargas magnet dejen de existir, ni que todos dejemos de descargar cine, sino que se puede hacer de otra forma y Paco León lo ha hecho. Obviamente, la mayoría de cines de este país rancio, casposo y deseoso de que volvamos a los años 50, no han seguido la iniciativa de Paco de estrenar simultáneamente en cines, on line,  en formato físico y en televisión a la carta, prefiriendo mantener una cartelera palomitera y llena de bodrios infumables, en vez de apostar por el producto patrio. No obstante, ha conseguido crear un abanico de posibilidades hasta ahora nunca visto. Si hace unas semanas Filmin conseguía estrenar simultáneamente el documental Marley a la vez que en las salas, con Carmina o Revienta, de Paco león, se ha llegado un poco más lejos y este es el futuro, ni más ni menos, crear plataformas de difusión a un precio asequible y de manera global. Ahora, con la subida del IVA del 8% al 21%,  los cines se verán obligados a incrementar el precio de las entradas para compensar la subida, por lo que en esas estamos. Me da rabia, porque es un palo inadmisible a la cultura , pero cuando empiecen a cerrar cines y cines, entonces se acordaran de que se podían haber hecho las cosas de otra manera y haber mercantilizado la cultura como lo han estado haciendo hasta ahora. En cualquier caso, la iniciativa es merecedora de todos los  aplausos posibles y ojalá las cosas sigan por ese camino.

 Extracto de la Web oficial de la película donde se puede ver la multitud de formatos en la que puedes verla. Imposible perdérsela.

Pero vamos a lo que importa  que es la película en sí y qué película. Paco debuta en la dirección cinematográfica para mostrarnos un retrato, a camino entre la ficción y la realidad, sobre su madre, la propia Carmina Baños, una historia castiza y muy española, de la que algunos han visto un retrato de una España olvidada, casi como si el sinécdoque que se crea entre la película y lo que pensamos de España fuera algo peyorativo, cuando es todo lo contrario. El problema es que  nos da miedo aceptar que, en cierto modo, todos somos Carmina, y que hay lugares y personas que no lo tienen todo y que hacen lo que pueden y no por ello son peores que la gente de ciudad abrazada a su maravilloso Ipad y eso es lo que principalmente ha querido representar Paco, una historia casi universal. Carmina es una heroína de los tiempos modernos una madre modelo que te calla la boca y se caga en tus muertos si hace falta. Que no tiene reparo en fingir golpes, golpeándose ella misma o protagonizar escenas escatológicas de las que hasta la mismísima Divine se sentiría orgullosa.

Gran escena la del accidente de coche.

No obstante, si nos olvidamos un poco de lo grande que es esta señora y nos centramos en los aspectos puramente cinematográficos, vemos como la cinta de Paco, en muchos casos, es bastante irregular y esta llena de momentos en los que se nota que la opción del falso documental fue la más factible para contar la historia de Carmina Baños, pero quizá no la más acertada formalmente y en muchos casos, este formato hace que pierda el interés en lo que me está contando. Aunque cuando Paco acierta con lo que se muestra,  acierta de verdad y la mandíbula se me desencaja de la risa, como la historia del lavado vaginal o las dos memorables escenas de El Cobrador del Frac. Está claro que  cuando una película te entra por el lado bueno, aunque veas fallos, aunque no sea completamente perfecta o todo lo que puede serlo con los medios que se tienen, es imposible hablar demasiado mal de ella y esto es lo que me ha ocurrido a mi con Carmina o Revienta. Me lo he pasado bien, me he reído y he comprendido a este personaje tan entrañable. Una apuesta recomendable al 100% y por supuesto me quito el sombrero ante la iniciativa de Paco León. ¡Bravo!